Ponente
Descripción
Las áreas protegidas constituyen una reconocida herramienta a nivel mundial para preservar la biodiversidad. Sin embargo, la capacidad de las áreas protegidas para conservar la biodiversidad dulceacuícola es cuestionable debido a que los requerimientos ecológicos específicos de los organismos de agua dulce, tales como la conectividad a lo largo de las cuencas hidrográficas, generalmente no se satisfacen. En la presente investigación evaluamos la representación de la biodiversidad dulceacuícola en el Sistema Nacional de Áreas Protegidas de Cuba (SNAP) y proponemos sitios prioritarios para acciones de conservación teniendo en cuenta requerimientos de conectividad espacial. Partimos de la modelación de la distribución espacial de 246 especies de plantas acuáticas, artrópodos, peces y reptiles. Seguidamente, utilizamos los resultados de dichos modelos para identificar mediante un algoritmo de optimización una red de áreas protegidas hipotética que cumpla con ciertas metas cuantitativas de biodiversidad (i.e. 30 % de cobertura para cada especie) y facilite la conectividad espacial entre unidades de conservación. La nueva red incluye el SNAP y adiciona un conjunto de áreas localizadas en las zonas de menor impacto antrópico posible, para minimizar de esta forma el costo que significaría su implementación. En comparación con el SNAP, nuestra red de áreas protegidas es superior en cuanto a la conectividad longitudinal y horizontal a nivel de cuencas hidrográficas y con respecto al cumplimiento de las metas cuantitativas de biodiversidad.