Ponente
Descripción
En la actualidad son múltiples las experiencias dirigidas a la educación en la vejez, las cuales como tendencia abogan por la accesibilidad, la inclusión y la integración social. En cuestiones de derechos de las personas mayores, y en particular de la educación, se evidencian esfuerzos desde 1991 con los Principios de las Naciones Unidas en favor de las Personas de Edad. Dicho documento pondera los principios de participación, autorrealización e independencia, y por tanto refiere la pertinencia del acceso a recursos educativos, culturales, espirituales y recreativos; acceso a programas educativos y de formación; y poder aprovechar oportunidades de colaboración a la comunidad. Resulta fundamental visualizar la educación en la vejez y el empoderamiento como procesos de simultáneo fortalecimiento en tanto constituyen vías para el desarrollo de la autonomía como libertad para tomar decisiones y realizar actividades, y vinculada con la independencia funcional en la vida cotidiana. Asimismo se favorece la conciencia crítica en las personas mayores, entendida como la capacidad para el juicio crítico, que conecta con el conocimiento y ejercicio de derechos. Todo ello redunda en la posibilidad de inclusión e integración social desde la colaboración con otros para lograr cambios y que evidencia la incorporación efectiva y sustantiva de las personas mayores mediante los mecanismos articulados de redistribución y reconocimiento; en protección a su calidad de vida. En definitiva, en la vejez es esencial aprender para poder ejercer una ciudadanía activa, lo cual transita por procesos subyacentes de consolidación de la participación social y empoderamiento.