Ponente
Descripción
Desde finales del siglo precedente Estados Unidos intentó ejercer la hegemonía en el hemisferio occidental, a partir de la implantación de las reglas del libre comercio a escala continental. En plan fracasó en su concepción original, pero Washington logró implantar dichas normas en las relaciones económicas bilaterales con un amplio grupo de países. A partir de los movimientos sociales generados en un grupo de naciones y el surgimiento de nuevos proyectos regionales emancipatorios, Estados Unidos ha refinado sus armas de dominación más allá de la presencia militar y la penetración económica, logrando reducir la capacidad de acción de líderes, partidos y gobiernos completos haciendo uso de la judicialización de la política y de nuevas armas ideológicas y culturales, en particular la utilización de internet y de las redes sociales. En ese contexto, las autoridades estadounidenses identifican como el gran nuevo reto extracontinental, más allá de las potencias europeas, o el socialismo, a la eficiente y productiva economía china que gana espacio de forma acelerada en América Latina y el Caribe.
