Ponente
Descripción
La naturaleza siempre cambiante del diseño, las transformaciones sociales y las fuertes presiones del entorno que permiten enmarcar su accionar, nos conducen a repensar la importancia de comprender las cualidades de los “sistemas vivos” que son, en esencia, sistemas complejos y adaptativos, cargados de incertidumbre, con una alta capacidad de respuesta y aprendizaje, que tienden a ser sensibles a sus condiciones iniciales. De tal modo que las metodologías de diseño emergen desde la complejidad de una práctica social y cognitiva donde subyace lo emocional (lo vivo), lo objetual (lo cultural) y la racional (el pensamiento), y por lo tanto, el límite entre lo subjetivo y objetivo no es sencillo de establecer. En este sentido, el enfoque de sistemas complejos se plantea como herramienta teórico-metodológica para investigar los modos de ser, pensar y actuar en el diseño con el fin de transitar hacia la sostenibilidad. A partir del análisis de propiedades emergentes de los sistemas complejos donde se inserta el diseño (seres humanos y naturaleza que interaccionan en conjunto y dinámicamente) se propone un modelo adaptativo para estudiar de una mejor forma el entramado de acciones, actores, sensibilidades y conocimientos que conviven dentro del proceso de diseño. Por medio de la investigación-acción se examinan los impactos de su implementación, donde se entretejen las experiencias colectivas y la ecología de saberes (entendida como acciones de diálogo recíproco) que evidencia un mayor entendimiento y abordaje sistémico en las intervenciones de los problemas de diseño.
