Ponente
Descripción
En los últimos dos decenios aumentó cerca de un 40% la demanda total de agua, y actualmente dos tercios de la población mundial está viviendo en países con escasez de agua moderada o grave. Por otra parte se evidencia un crecimiento acelerado del número de nuevos contaminantes, la transferencia tecnológica hacia los países subdesarrollados es casi nula y su infraestructura analítica se hacen obsoletas lo que repercute en la incapacidad de trazar normas más exigentes y el desconocimiento de la acción de nuevos compuestos tóxicos. Esto posibilita el uso de las actuales soluciones nanotecnológicas. En este trabajo se realiza un análisis de las implicaciones de la nanotecnología en el tratamiento de agua y en el monitoreo de la calidad de la misma. Entre ellas el uso de la nanofiltración para remover metales pesados y toxinas biológicas, el ablandamiento del agua y la depuración de aguas residuales. Se muestra en un estudio de caso que es posible inmovilizar el arsénico con el uso de nanopartículas de hierro y se describen los nanosensores capaces de monitorear virus y bacterias presentes en el agua potable. Se concluye que las nanotecnologías podrían paliar los problemas del agua si resuelven los retos técnicos que presenta la remoción de contaminantes como bacterias, virus, arsénico, mercurio y pesticidas; ya que ofrecen alternativas más económicas, eficaces, eficientes y duraderas, en particular porque el uso de nanopartículas para el tratamiento de aguas permitirá que los procesos de fabricación contaminen menos en comparación con los métodos tradicionales.