Ponente
Descripción
La retórica, en sentido amplio, cubre tres grandes campos: teórico, productivo y práctico u oratorio. El primero consiste tanto en una enseñanza teórica (enseñar a observar-teorizar) como a la aplicación de la teoría (el acto de analizar e interpretar); la segunda es un modelo pedagógico aplicado (la enseñanza del discurso eficaz y la práctica) y la tercera es una actividad, la que se aprende mediante el ejemplo y la imitación. Los estudiosos modernos de la retórica se orientan sobre todo a la teoría, que, por un lado, consiste en clasificar, describir y definir los diferentes elementos discursivos productores de persuasividad. Su número es inconmensuralbe. Dos ejemplos son el Tratado de la argumentación de Perelman-Tyteca (1958) y la Retórica general del Grupo μ (1980). Por otro lado, estos estudios abordan esos elementos en los textos concretos de cualquier género con base en los estudios teóricos. Se materializan en publicaciones como el texto de Elina Miranda 2024: “Ensayo, polémica y retórica en Nuestra América de José Martí” o el de Alejandra Vitale 2024: “La retórica del pedido de perdón. El caso del papa Francisco”. Generalmente los estudios teóricos recurren a los ejemplos textuales concretos para ilustrar la teoría, mientras que las aplicaciones contienen una primera parte dedicada a los fundamentos teóricos que habrán de seguirse. El propósito de este trabajo es presentar algunas consideraciones sobre el campo teórico de los estudios retóricos y el abandono de los métodos pedagógicos y su aplicación oratoria.