Ponente
Descripción
Introducción
Hasta la actualidad, se ha avanzado de una investigación descriptiva del consumo cultural a una que da valor a las producciones subjetivas y simbólicas asociadas a este constructo. Así, se entiende como un escenario de aprendizaje social donde las personas producen, reproducen y regulan sus comportamientos.
Estudios internacionales corroboran la relación entre los consumos culturales y factores de riesgo de agresividad e indisciplinas sociales en adolescentes. Resultados nacionales muestran su incidencia en la identidad de adolescentes transgresores, sin embargo, las investigaciones sobre estos temas aún son escasas.
Objetivos
Fue planteado el objetivo de describir el consumo cultural de un grupo de adolescentes internos en la Escuela de Formación Integral (EFI) de La Habana a partir de su vinculación con la conducta transgresora, en los meses de junio a octubre del año 2022.
Método
Se aplicó un muestreo no probabilístico, para una muestra total de 30 sujetos: 15 adolescentes y 8 educadores de la EFI de La Habana y 7 informantes clave del Sistema de Atención a Menores. La metodología fue cualitativa con un diseño fenomenológico, empleándose como técnicas la entrevista, la observación participante y el análisis documental.
Resultados
Se tiene que sus principales prácticas son: compartir con amigos y familiares e ir a fiestas u otros lugares recreativos, escuchar música y ver materiales audiovisuales.
Entre sus espacios favoritos sobresalen los «bonches», fiestas callejeras nocturnas a las que asisten asiduamente. Constituyen escenarios en los que pueden divertirse pero, además, adoptar de forma deliberada, conductas como pernoctar, deambular, robar y consumir sustancias nocivas.
Se obtuvo una preferencia por el género musical reguetón, definiendo el tipo de música de reguetón que escuchan como: «la cubana repartera», añadiendo que <<es caliente y ambiental>> y que <>
Existe un rechazo de materiales televisivos cubanos, con predominio de consumo de materiales extranjeros, fundamentalmente series y películas que versan sobre sexo, mafia, narco y violencias.
Prevalecen prácticas que suponen la satisfacción de necesidades de socialización, recreación e intercambio con iguales. A la vez, existe una exposición predominante de estos a contenidos banales, vulgares y negativos, a partir de los que se dan procesos de apropiación, a nivel simbólico, generalmente sin crítica reflexiva.
Conclusiones
El consumo cultural incide en la producción subjetiva y la regulación de comportamientos asociados a la transgresión de la ley. Los significados y sentidos personales que los adolescentes ofrecen a sus contenidos, influyen en la adopción y reproducción de conductas alejadas de las normas sociales y legales, por las que viven como consecuencia, procesos de internamiento, etiquetamiento y exclusión social.
Palabras claves | transgresión de la ley, consumo cultural, adolescentes |
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Modalidad de participación | Presencial |
País | Cuba |